domingo, 4 de noviembre de 2007

CAPITULO II LA LLEGADA




Oscuros días envuelven mi llegada, anunciada entre maullidos por aquellos que son libres, aunque sigan el viento de los acontecimientos. . .







Fue la esperanza la que me trajo hasta aquí o quizá el pasado, que ahora se me antojaba fresco presa de un capricho del destino que me hacia recordar que no era la primera vez, que veía el final de una humanidad, y como entonces, ahora tampoco estaba todo perdido; mis pasos abrieron el camino que seguía mi instinto para llegar a esta oscura ciudad, algo en mi interior me empujaba hacia mi nuevo destino y aun no sabia cual era.
Me deslice por las calles oscuras hasta un perdido callejón con el único motivo de encontrar la esperanza, sabiendo que siempre surgía un destello en los momentos mas oscuros llegue hasta ella, en el rincón mas olvidado de la ciudad ella me fue mostrada, para que no olvidara porque estaba aquí; aquella bella joven fue marcada desde su nacimiento por el aura de una estrella que seguía iluminándola, yo solo era el siervo una vez mas del destino. En todo este tiempo de aparente libertad, siempre tube una misión que cumplir, confinado en este mundo que yo elegí y en el que aparentemente todo estaba escrito; el gran orden universal establecía las leyes que lo regían todo y aun así era impredecible en su desenlace final.
Ahora que al fin había llegado me preguntaba: ¿en que era especial ese ser al que buscaba, porque se me había dado la oportunidad de redimirme y custodiarla? sabia que todo me seria desvelado a su tiempo, ahora solo debía velar por ella.
Me oculte en la oscuridad de la noche, en este remoto callejón, donde apenas la luz de una vieja farola luchaba por iluminarlo, y justo encima, su silueta me fue mostrada como una señal mas; por primera vez mis ojos recobraron una brizna de ilusión, la había encontrado, sentada en la cornisa, segura de si misma cual gata en la noche contemplaba su ansiada libertad, quizá soñando en que vinieran días mejores; mientras la miraba me deje llevar por los recuerdos de tiempos pasados, al principio de todo, aquellos días que nunca olvido, los que me han llevado al paso del tiempo hasta aquí.

5 comentarios:

noctambulus dijo...

probando probando haber si funciona

Julio Rey dijo...

Si que es bonita, reconozco ser un privilegiado, no tanto por poder vivir dibujando sino por la oportunidad que se me ofrece de opinar; aunque también tengo que decirte que contradecir casi diariamente la línea editorial de tu periódico te pone en una situación de funambulista francamente incomoda.
Noctámbulo es un placer leerte. Puedes pasar a mi blog y sentarte.
El de la bombilla flotante

José Manuel dijo...

Definitivamente, funciona

Anónimo dijo...

Simplemente quedarse sentada en la cornisa, respirar, mirar el mas allá y simplemente mirarte a ti misma, como colgada de miles de hilos invisibles que te transportan y te hacen volar.
En algún momento me creí ella y quise lograrlo.

Unknown dijo...

Hola!!!

Actualmente estoy iniciando mi blog lo cual le faltan unos cuantos ajustes.

Leí un capitulo y coño, si lo ke kieres es hacer ke el lector se situe en este ambiente de verdad ke lo lograste. Sigue adelante.

Te dejo unas lineas de Robi Draco ke dicen...

"Voy hablando del amor mientras camino por el valle de las flores de la muerte...
Flores del avismo...para matar el llanto,
Avismo de la sangre...para matar el llanto,
Llanto del deseo...para matar el llanto,
Deseo de la carne... para martar el llanto."

Dario P.